Las cápsulas blandas, también llamadas cápsulas de gelatina son una de las tantas formas como se puede presentar un medicamento para ser consumido por un paciente. Las cápsulas de gelatina blanda son un invento ideado en 1833 por el francés Francois Achille Barnabe Mothes, aunque la patente la gestionó un año después (Rodriguez, Los orígenes de la fabricación industrial del medicamento, 2005). Barnabe hizo este invento con el interés de ocultar el sabor, olor y apariencia desagradable de un medicamento y pronto recibió todos los elogios de la comunidad médica.
Hoy en día las cápsulas blandas siguen siendo la opción favorita de muchos médicos y pacientes, aunque todavía no todos los medicamentos se ofrecen bajo esta presentación. Aquí algunos de los beneficios de las cápsulas blandas:
Fáciles de digerir
Esto se debe a su cáscara de gelatina que permite que se disuelva tras unos minutos de ser ingerida y llegar al estómago. No todas las cápsulas blandas tienen esta propiedad, también existen las llamadas cápsulas gastroresistentes, estas son cápsulas que tienen una liberación más lenta para que así resistan más tiempo en el jugo gástrico y puedan liberar sus principios activos en el fluido intestinal (Calvo et al, 2015).
Son más fáciles de deglutir
Para algunas personas las cápsulas duras no son fáciles de consumir. Esto sucede con más frecuencia en pacientes mayores y en niños. Frente a ello las cápsulas blandas son una mejor opción porque hacen más fácil el proceso. Algo que contribuye a su deglución es que el sabor se encuentra escondido en el interior de cada cápsula por lo que si se trata de medicamentos amargos o con un olor que no sea agradable este no se sentirá al consumirlo.
Biodisponibilidad del medicamento
Según la Dra. Paula Zingoni, las cápsulas de gelatina blanda se recomiendan debido a que tienen una mejor biodisponibilidad. Esto se debe a que, a diferencia de cápsulas duras no se destruyen con facilidad por lo que cada paciente tiene la seguridad de consumir la dosis correcta en cada toma.
Cierre hermético
Las cápsulas duras suelen desintegrarse fácilmente en contacto con el agua. Gracias a la gelatina que poseen las cápsulas blandas y a su cierre hermético desde su fabricación, los principios activos de cada medicamento pueden conservarse en el interior de las mismas hasta su consumo. El cierre hermético también es positivo debido a que hace posible que estas pastillas sean difíciles de adulterar sin que quien las compre note las modificaciones que ha sufrido.
Las cápsulas blandas son una opción para pacientes que tienen problemas para ingerir cápsulas duras, afortunadamente, al menos en los medicamentos más comunes y gran grupo de suplementos nutricionales, estas pueden comprarse en esta presentación.
Fuentes:
Rodriguez: https://books.google.com.pe/books?id=4I2KQFcI1CsC&printsec=frontcover#v=onepage&q&f=false
Calvo: https://ocw.ehu.eus/pluginfile.php/10112/mod_resource/content/1/10122015_materiales_de_estudio/Tema_3.-_Capsulas_blandas_corregido.pdf
Paula Zingoni: https://www.youtube.com/watch?v=2ncnDvcJh3o&t=198s