Tipos de estrés y cómo reconocerlos

El estrés es un problema que aqueja a las personas día tras día. Tanto es así que muchas personas terminan buscando métodos alternativos para lidiar con él,  como el consumo alguna vitamina para el estrés o medicamentos para el estrés. Entre ambas opciones siempre será mejor un complejo vitamínico como la vitamina b que no crea dependencias, a diferencia de ciertos medicamentos para este padecimiento.

El estrés no se presenta de una única forma. Según A. Orandi en su libro “El estrés qué es y cómo evitarlo” se puede decir que existen dos tipos de estrés. Por un lado se encuentra el eustrés, que es entendido como un tipo de estrés positivo, y por otro lado, es distrés, que a diferencia del anterior trae síntomas negativos en quien lo padece[1].

El estrés negativo a su vez, según The American Psychological Association [2] tiene tres clasificaciones más: estrés agudo, estrés agudo episódico y estrés crónico.

Estrés agudo

Es el tipo de estrés más usual y suele considerarse como un estrés a corto a plazo, por lo tanto es incapaz de causar daños irreversibles en el individuo que lo padece, es un tipo de estrés que se puede tratar y con el que cualquier persona puede lidiar.

Cuando este tipo de estrés se hace presente, hay diferentes formas de identificarlo. Emocionalmente, una persona con estrés agudo puede mostrar una mezcla de emociones negativas como irritabilidad, enojo, e incluso cierto grado de depresión.

El estrés agudo también puede manifestarse de forma física a través de dolores de cabeza, dolores musculares u óseos, desórdenes estomacales (flatulencias, acidez estomacal, estreñimientos, diarreas, etc.), cambios en la presión sanguínea y la temperatura corporal, etc.

Estrés agudo episódico

Este tipo de estrés suele aquejar a personas que asumen muchas responsabilidades a la vez y les cuesta lidiar con todas ellas, también se presenta en personas que viven angustiadas por todo, este segundo grupo suele pensar que el desastre es la reacción inmediata de toda acción, son sumamente pesimistas.

El primer grupo aquejado por este tipo de estrés se caracteriza porque suelen tener mal carácter producto de la carga nerviosa que llevan a cuestas. En líneas generales este tipo de estrés se caracteriza porque las personas que lo padecen suelen ser muy resistentes al cambio, incluso no ven problemas en su forma de actuar o comportarse y solo aceptan ir programas de recuperación si sienten la promesa de que esto aliviará sus padecimientos.

Y es que hay un grupo de personas que padecen estrés agudo episódico que pueden incluso desarrollar problemas cardiacos.

Estrés crónico

Este tipo de estrés es sumamente destructivo, no solo debilita a la persona físicamente, sino también emocional y socialmente. Suele presentarse cuando las personas no ven un escape o solución palpable a sus problemas. Este tipo de estrés suele afectar la personalidad de quien lo padece.

A diferencia de los anteriores, este tipo de estrés puede llevar a la muerte y es que conduce a las personas a concebir ideas de suicidio, la violencia hacia otros o incluso es tan fuerte que podría ocasionar ataques al corazón.

Los millennials serían la generación más expuesta al estrés

[1] http://biblioteca.umg.edu.gt/digital/85924.pdf

[2] http://www.apa.org/centrodeapoyo/tipos.aspx

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